¿Víctima o Victimari@?

Nunca más, ni a mí ni a ninguna otra

A propósito de que hoy se conmemora el “Día Internacional de la  Eliminación de la Violencia contra a Mujer”[1] reflexionaba sobre todas las acciones que cada año, para esta época, se realizan para “sensibilizar” sobre esta problemática así como los resultados alcanzados (que son muchos…aunque a algunas nos parezca insuficientes).

Por eso hoy decidí no hablar de las estadísticas ni de las personas que han muerto por los actos violentos hacia ellas. Hoy decidí hablar desde lo cotidiano, desde lo que vivimos día a día, como un acto de reflexión y compromiso para con la causa que no afecta sólo a una persona sino a la sociedad en su conjunto.

¿Cuántas veces hemos escuchado a nuestros hij@s hablar sobre un compañer@ de forma inadecuada: Que si es gordit@,  tal vez “lent@” o incluso “diferente”? ¿Cuántas veces al caminar por las calles de nuestro barrio hemos escuchado gritos que salen desde la casa de un/una vecina, tal vez “reclamando” porque no estaba algo listo; o, peor aún, comunicando el dolor  de la agresión física que recibía en ese momento? ¿Cuántas veces hemos escuchado/visto en los medios de comunicación noticias sobre asaltos, robos, violaciones, asesinatos, agresiones físicas que se dan tanto cerca como lejos de donde estamos? ¿Cuántas veces hemos visto y escuchado en espacios deportivos –que por naturaleza deberían ser familiares- agresiones físicas e insultos que no sólo se generan en la cancha sino además desde y en las gradas? ¿Cuántas veces en nuestros trabajos hemos observado cómo tan “sueltos de lengua” colegas comentan entre sí de la vida de otros sin siquiera averiguar si es cierto o no lo que se dice. Y lo peor, cuántas veces hemos repetido “lo que se dice” sin pensar en la persona de la que hablamos? ¿Cuántas veces hemos visto a autoridades y funcionarios públicos, que haciendo gala de su aparente “poder”, emiten cuanto improperio pueden contra sus opositores/as con el fin de desprestigiarlo/a, por el simple hecho de pensar diferente y/o por ser mujer? ¿Cuántas veces hemos visto en la empresa, en los gremios, en el entorno político partidista a personas que fraudulentamente buscan hacer daño a aquellos/as que les pueden resultar “peligrosos/as” para sus pretensiones con el único propósito de “sacarlos/as de su camino”?.

¿Cotidiano, verdad? Pero, ¿Qué hemos hecho al respecto?  La verdad, muchos no hemos hecho nada ya que es más fácil tomar la cómoda actitud de expectador/a porque sencillamente “a mí no me pasa”. Pero esa percepción, apreciado lector/a no es cierta.  Siempre, en algún momento de nuestro día, somos víctimas y/o victimarios. El territorio en el que vivimos coexiste  la violencia por naturaleza porque ésta se genera por la frustración, la ira, la envidia, el desamor, la incompetencia, el desconocimiento, la inmadurez, el sentimiento de inferioridad, entre otros.  ¿Alguna vez ha sentido uno de ellos? Ahora seguramente me estará dando “parcialmente” la razón. Lo verdaderamente importante no es que me la dé, sino que actúe para que, poco a poco, esos sentimientos no se apoderen de su vida ni la de su familia.

Si queremos vivir en una sociedad que progrese en libertad no sólo hay que promover sino además ejercitar una cultura de paz. ¡Decir y hacer!  Predicar con el ejemplo, en todos los ámbitos de nuestra vida, todos los 365 días de año. Allí radica el verdadero compromiso. Una vida libre de violencia es un derecho humano #UNETE para poner fin a la violencia contra las mujeres.

[1] El 17 de diciembre de 1999 a través de la resolución 14/134 la Asamblea General de Naciones Unidas declaró el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer con el propósito de que la sociedad entera se organizara para sensibilizar a la opinión pública respecto al problema de la violencia contra la mujer.  Este día (25 de noviembre) fue escogido en conmemoración del brutal asesinato de las hermanas Mirabal (1960), activistas políticas de la República Dominicana, por orden del gobernante Rafael Trujillo (1930-1961)